miércoles, 26 de marzo de 2008
La Semana Santa más amistosa
Esta Semana Santa me he divertido mucho. Hasta el miércoles he estado en Sevilla. El jueves me fuí a Sanlucar de Barrameda con mi familia. Todo el jueves y todo el viernes estuve con un amigo en casa de mi abuela. El sábado me fuí a jugar al baloncesto al polideportivo de Sanlucar. Estuve allí jugando y a la una me fuí. También me lo pasé muy bien porque sobre las dos me fuí a una barbacoa a casa de unos amigos de mis abuelos. Allí conocí a más gente por lo que me lo pasé muy bien.
lunes, 17 de marzo de 2008
El Magnolio
Se entraba a la calle por un arco. Era estrecha, tanto que quien iba por en medio de ella, al extender a los lados sus brazos, podía tocar ambos muros. Luego, tras una cancela, iba sesgada a perderse en el dédalo de otras callejas y plazoletas que componían aquel barrio antiguo. Al fondo de la calle sólo había una puertecilla siempre cerrada, y parecía como si la única salida fuera por encima de las casas, hacía el cielo de un ardiente azul.
Fragmento de Ocnos. Luis Cernuda.
Descripción de una calle del barrio de Santa Cruz. Sevilla.
Fragmento de Ocnos. Luis Cernuda.
Descripción de una calle del barrio de Santa Cruz. Sevilla.
viernes, 14 de marzo de 2008
Capital de provincia
Ciudad de sucias tejas soleadas:
casi eres realidad, apenas nido
solo un rumor, un humo desprendido,
de las paderas verdes y asombradas.
Luego hay hombres de vidas apretadas
a tu destino semiderruido
y muchachas que crecen entre el ruido
cual si estuvieran entre amor sembradas.
A casi todas miro tiernamete,
y los viejos alegran tus afueras
con sus traviesas cabelleras blancas.
Yo estoy contento y, cariñosamente,
caballo gris me gustaria que fueras
para darte palmadas en las ancas.
Ángel González: Áspero mundo.
Comentario del poema:
Este poema me gusta mucho porque habla de la vida en la ciudad y a la vez explica como es la ciudad. Cuenta que la vida en la ciudad es muy apretada y con mucho ruido. Tambien nombra a la ciudad como si fuera un caballo para poderle demostrarle que le gusta ese sitio.
casi eres realidad, apenas nido
solo un rumor, un humo desprendido,
de las paderas verdes y asombradas.
Luego hay hombres de vidas apretadas
a tu destino semiderruido
y muchachas que crecen entre el ruido
cual si estuvieran entre amor sembradas.
A casi todas miro tiernamete,
y los viejos alegran tus afueras
con sus traviesas cabelleras blancas.
Yo estoy contento y, cariñosamente,
caballo gris me gustaria que fueras
para darte palmadas en las ancas.
Ángel González: Áspero mundo.
Comentario del poema:
Este poema me gusta mucho porque habla de la vida en la ciudad y a la vez explica como es la ciudad. Cuenta que la vida en la ciudad es muy apretada y con mucho ruido. Tambien nombra a la ciudad como si fuera un caballo para poderle demostrarle que le gusta ese sitio.
martes, 11 de marzo de 2008
El niño yuntero.
CARNE DE YUGO, ha nacido
más humillado que bello,
con el cuello perseguido
por el yugo para el cuello.
Nace,como la herramienta,
a los golpes destinado,
de una tierra desontenta
y un insatisfecho arado.
Entre estiércol puro y vivo
de vacas,trae a la vida
un alma color de olivo
vieja ya y encallecida.
Empieza a vivir, y epieza
a morir de punta a punta
levantando la corteza
de su madre con la yunta.
Empieza a sentir, y siente
la vida como una guerra,
y a dar fatigosamente
en los huesos de la tierra.
Contar sus años no sabe,
y ya sabe que el sudor
es una corona grave
de sal para el labrador.
Trabaja, y mientras trabaja
masculinamente serio,
se unge e lluvia y se alhaja
de carne de cementerio.
A fuerza de golpes, fuerte,
y a fuerza de sol, bruñido
con una ambición de muerte
despedezada un pan reñido.
Cada nuevo día es
más raiz, menos criatura,
que escucha bajo sus pies
la voz de sepultura.
Y como raiz se hunde
en la tierra lentamente
para que la tierra inunde
de paz y panes su frente.
Me duele este niño hambriento
como una grandiosa espina,
y su vivir ceniciento
revuelve mi alma de encina.
Lo veo arar los rastrojos,
y devorar un mendrugo,
y declarar con los ojos
que por qué es carne de yugo.
Me da su arado en el pecho,
y su vida en la garganta,
y sufro viendo el barbecho
tan grande bajo su planta.
¿Quién salvará a este chiquillo
menor que un grano de avena?
¿De dónde saldrá el martillo
derdrugo de esta cadena?
Que salga del corazón
de los hombres jornaleros,
que antes de ser hombres son
y han sido niños yunteros.
Miguel Hernández.
más humillado que bello,
con el cuello perseguido
por el yugo para el cuello.
Nace,como la herramienta,
a los golpes destinado,
de una tierra desontenta
y un insatisfecho arado.
Entre estiércol puro y vivo
de vacas,trae a la vida
un alma color de olivo
vieja ya y encallecida.
Empieza a vivir, y epieza
a morir de punta a punta
levantando la corteza
de su madre con la yunta.
Empieza a sentir, y siente
la vida como una guerra,
y a dar fatigosamente
en los huesos de la tierra.
Contar sus años no sabe,
y ya sabe que el sudor
es una corona grave
de sal para el labrador.
Trabaja, y mientras trabaja
masculinamente serio,
se unge e lluvia y se alhaja
de carne de cementerio.
A fuerza de golpes, fuerte,
y a fuerza de sol, bruñido
con una ambición de muerte
despedezada un pan reñido.
Cada nuevo día es
más raiz, menos criatura,
que escucha bajo sus pies
la voz de sepultura.
Y como raiz se hunde
en la tierra lentamente
para que la tierra inunde
de paz y panes su frente.
Me duele este niño hambriento
como una grandiosa espina,
y su vivir ceniciento
revuelve mi alma de encina.
Lo veo arar los rastrojos,
y devorar un mendrugo,
y declarar con los ojos
que por qué es carne de yugo.
Me da su arado en el pecho,
y su vida en la garganta,
y sufro viendo el barbecho
tan grande bajo su planta.
¿Quién salvará a este chiquillo
menor que un grano de avena?
¿De dónde saldrá el martillo
derdrugo de esta cadena?
Que salga del corazón
de los hombres jornaleros,
que antes de ser hombres son
y han sido niños yunteros.
Miguel Hernández.
Abril
El chamariz es el chopo.
-Y ¿qué más?
El chopo en el cielo azul.
-Y ¿qué más?
-El cielo azul en el agua.
-Y ¿que más?
-El agua en la hojita nueva.
-Y ¿qué más?
-La hojita nueva en la rosa.
-Y ¿qué más?
-La rosa en mi corazón.
-Y ¿qué más?
-¡Mi corazón en el tuyo!
Juan Ramón Jiménez.
-Y ¿qué más?
El chopo en el cielo azul.
-Y ¿qué más?
-El cielo azul en el agua.
-Y ¿que más?
-El agua en la hojita nueva.
-Y ¿qué más?
-La hojita nueva en la rosa.
-Y ¿qué más?
-La rosa en mi corazón.
-Y ¿qué más?
-¡Mi corazón en el tuyo!
Juan Ramón Jiménez.
lunes, 10 de marzo de 2008
¡Bienvenidos a mi blog!
¡Hola! Espero que os guste mi blog. Aquí añadiré algunos poemas de los autores mas conocidos y algunos deberes que se hagan en clase también los iré anotando aquí. Podeis ver todo lo que yo vaya anotando.
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